Línia Educativa

La escuela se define por el respeto al niño y su familia, a los profesionales que la forman y a la comunidad en que está integrada, a los valores democráticos y, por tanto, a la pluralidad.

La escuela tiene como lengua propia el catalán. La diversidad de procedencia de las familias requiere que cuando un niño tiene una lengua propia diferente se le hable en su lengua, siempre que es posible, conviviendo con el catalán hasta que lo adquiere.

El niño, nace con un potencial que empieza a desarrollarse intensamente los primeros años de vida. La escuela ha de facilitarle la relación personal, los estímulos, el espacio y los materiales, que respetando su propio ritmo, le permita desarrollarlo al máximo, favoreciendo la autoestima, la autonomía y el deseo de aprender.

La relación con las familias es otro de los aspectos fundamentales de nuestra línea educativa. La crianza de los niños y niñas requiere coherencia entre todos los que intervienen, por tanto, el tándem familia/escuela exige que exista una relación continuada que potencie la confianza mutua.